El alta frecuencia facial es una innovadora técnica de tratamiento que utiliza corriente alterna para generar un aumento de calor en la piel. Este método efectivo no solo mejora la circulación sanguínea, sino que también actúa como un potente bactericida y fungicida, ayudando a desinflamar, desinfectar y oxigenar la piel.
Irrigación Sanguínea Mejorada: Al aumentar la circulación, el alta frecuencia promueve una piel más saludable y radiante.
Propiedades Desinfectantes: Combate bacterias y hongos, ideal para el tratamiento de diversas afecciones cutáneas.
Uso Versátil: Se puede realizar con electrodos llenos de gas, ya sea mediante un dispositivo portátil o una consola de tratamiento, adaptándose a las necesidades de cada profesional de la estética.
